VENUS CRISTALINA
Lloverá, amor,
en la rosa oscura de la noche.
Púrpura y seda mezclarán
los lunares que cubren tu piel
y, quebrantarás el nombre
del sueño perdido en tu cuerpo,
acariciado por la brisa de los labios,
rozando tus erectos senos de arena,
descendiendo lentamente
hacia la cima de venus cristalina.
Y como dulce panel se adherirá:
Cual abeja a su miel.
Cual amante a su amor.
Cual sediento a su sed.
Lloverá, amor,
y la cúpula virginal vibrante
exclamará gozosa y complacida,
que la rosa oscura de la noche
ha amanecido florecida.
LLUEVE CORAZÓN
Llueve corazón,
mojándote muy adentro,
que blancas son como el amor,
las gotas que te hicieron.
Llueve corazón,
cálate hasta los huesos,
podrás comprender mejor,
como se muere por dentro.
Llueve corazón
aunque estés todo seco,
y tus venas solo den dolor,
como el más vil veneno.
Llueve corazón,
aunque no me lleves dentro,
si jamás te conocí,
menos quejas tendrás de mi cuerpo.
Llueve corazón,
no tengas recelos,
que allí van a rendir,
todos los complicados sueños.
Llueve corazón,
ya a solas te dejo,
y si tu lluvia cesa...
chaparrón te deseo luego.
COMO SIEMPRE
Como siempre se pierde el mar
en tus ojos transparentes.
Como siempre dejas de husmear
en mis bolsillos calientes.
Como siempre sueles alcanzar
la frontera de mis anhelos.
Como siempre rompes a llorar
cuando yo alzo el vuelo.
Como siempre, eres como sientes.
Como siempre el adiós,
dispara dardos de muerte.
Como siempre el fuego quema
tu corazón silenciosamente.
Como siempre...
se quiere como se siente.
Como siempre, se siente,
lo que realmente se quiere;
sin olvidar que ayer fue presente
y mañana será futuro ausente.
Como siempre.
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