martes, 5 de abril de 2016

21 GRAMOS... OFFSHORE.




21 GRAMOS... OFFSHORE.



Si es sabido que, 21 GRAMOS... es lo que pesa el alma, poco sabemos en realidad, lo que pesa el cuerpo... del delito... financiero político empresarial. Un básico instinto clásico, que nos arrastra a toda clase de argucias, tretas y o artimañas para lavar o esconder “el crimen” de la impunidad, indecencia y la hipocresía galopante que nos muestra la verdad que se esconde tras tanta excelencia, honorabilidad y ostentosidad, en un mundo donde y, al mismo tiempo, millares de personas mueren de hambre, frio o de enfermedades. ¿Acaso, eso les importa a los gobernantes de turno? No, rotundo;Tienen más a bien conchabarse entre ellos, no todos, y saquear a los más débiles hasta hundirlos y destruirlos. Es el lema, el santo y seña de los grandes depredadores de las junglas... de cristal. Y no falla, siempre y a través de la Historia, es el mismo hilo conductor: ROBAR. ENGAÑAR, y en algunos casos, hasta... MATAR. Los tres mandamientos a seguir si quieres triunfar, sobresalir y ¿ser respetado?
Robar: Nos hará más poderosos, más grandes y temibles.
Engañar: Nos dará tiempo para esconder lo robado.
Matar: Si no llegan a eso, sí a coaccionar, intimidar y extorsionar.
Todo ello muy característico de organizaciones mafiosas y criminales, ah, pero, con el buen sello de la CASA. De ahí, surgen los clanes familiares que se hacen muy poderosas de la noche a la mañana y quizás... ¿con la connivencia de Dios? Ya que, siempre están rodeados de clérigos y religiosas, que rezan por sus almas, para hacerlas más grandes ¿en el Cielo?, porque aquí, está científicamente comprobado que pesan, como ya dije antes, todas lo mismo: 21 gramos... PARA TANTAS FECHORÍAS.
Y, hablando de la Iglesia, en España se destinan 11.000 millones de euros anuales, y ¿saben cuánto destina la Iglesia a Cáritas? 2,5% del total, cifra verdaderamente irrisoria, sabido que este dinero procede de los españoles..., con la Iglesia hemos topado. Amén.
Y, cambiando de tema, saben que los SUICIDIOS han crecido un 20% desde el inicio de la crisis, según INE. Casi 11 muertos al día, duplicando a los muertos por accidente de tráfico. ¿Por qué de esto no se habla más a menudo en las tertulias y programas de televisión? ¿Pacto de silencio, quizás? ¿Despiste? Y, por cierto, cómo es que se publicita tanto para que no te mueras en un accidente vial o de circulación y en cambio por suicidios inducidos por las hipotecas, se calla. ¿Será que en el primer caso: Es más por el propio interés de las compañías aseguradoras? Y el segundo: A nadie le importa. Ah, mundo cruel el que vivimos, tantas fiestas para unos; y tantos funerales para los otros... OFFSHORE.

Reflexión de: Fidel León Gutiérrez, @Bailedelocos






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