viernes, 10 de abril de 2015

1. MEMORIAS DE UN GIGOLÓ





    1.MEMORIAS DE UN GIGOLÓ



    ...Iñaki se cortaba las uñas de los pies y barruntaba:Si se piensa la arpía esa, que se lo voy ha hacer gratis, ja, lo tiene claro la vieja chocha. Asco me da, la viciosa pajarraca, podrida... de dinero.” _Se introdujo en la bañera y se dio una ducha rápida; le esperaba otro encuentro, esta vez, fortuito, recomendación de una clienta muy especial para él, y de la cual se fiaba, porque le había sacado de un lío muy... escabroso; Por tanto, a esta mujer, Iñaki le debía un favor enorme. Y le estaba muy agradecido. La única condición que le ponía era: CON PERROS: NO. _El pobre infeliz, no se imaginaba lo que le esperaba.
    Tener y mantener un cuerpo perfecto, no era fácil. Gimnasio, buena comida, lecturas..., las justas. Cine, futbol, bicicleta y unas pocas... "golferías" más, por internet. Quería jubilarse pronto y vivir como un rey. Salió de un pequeño pueblo costero en busca de oportunidades y fortuna, él no quería ser pescador como su padre y su abuelo. Su intención era “pescar” algo más grande; El campo lo detestaba como a la misma vulgaridad. Sí, se veía un tío guapo, fino y escultural, y tenía una peculiar gracia al andar. Iñaki pensaba que, con eso y un poco de suerte, podía triunfar y llevar una vida, sino regalada, al menos... desahogada, más cómoda que la que dejó atrás; pero nadie daba euros regalados, se los tenía uno que ganar a pulso... o bueno, ya saben...





ESTAS ERAN SUS REGLAS, 
SUS MANDAMIENTOS.

(Lean aquí, abajo)




No hay comentarios:

Publicar un comentario